Tras la odisea carcelaria que vivió hace unos meses, Larry Hernández está muy agradecido por el apoyo que ha recibido de sus fans y el poder pasar la Navidad en libertad, si bien no estará acompañado de todos sus seres queridos.
“Estoy bendecido por tener tanta familia, tantas señoras que se me acercan y que estuvieron orando por mí en el proceso de mi vida que pasé y que estoy pasando…Siempre voy a decirle gracias por todas sus oraciones, por todas esas que han ido a la casa a dejarme regalos», contó al programa El gordo y la flaca (Univisión). “Yo respeto cualquier religión. Yo creo que hay un solo Dios y estoy muy apegado a Él en estos momentos”.
También lamentó lloroso que no podrá pasar las Fiestas con su madre ni sus hijos varones, aunque estará con sus hijas y su pareja, Kenia Ontiveros.
“Este año desgraciadamente mi mamá no va a poder estar conmigo. La Navidad ella la va a pasar en México. Yo desgraciadamente no puedo ir a México y no vamos a estar juntos. Yo entiendo que también están mis hermanos, que están allá en México, y voy a estar con ella antes», apuntó.
«Será una Navidad bonita porque voy a estar con mis hijas. Mis hijos tampoco van a poder estar conmigo. Ojalá pudiera estar, aunque sea uno. Muchas veces no puedes controlar que estén todos contigo. Yo estoy pasando por un proceso donde la mamá está con sus hijos”, dijo sobre su expareja. “Creo que lo van a pasar con su mamá y tengo que ser fuerte. Tengo que doblarme y tengo que ser fuerte para tener una Navidad bonita”.
El artista reveló que le ha vuelto la inspiración después de su amarga experiencia cuando arrestado en septiembre en un aeropuerto de California y extraditado casi un mes después a Carolina del Sur, donde enfrenta cargos de secuestro y agresión a raíz de una disputa por el pago de un concierto.
“Pensé que había perdido la noción de la pluma, pero me reencontré con ella. Bendito sea Dios que le hice esta canción a mi madre, le hice dos canciones a Dios. Una la canto con todo mi corazón, donde dice un pedazo que yo me sentía solo y que llegó en el mejor momento donde yo lo necesitaba”, indicó.
Un Hernández más reflexivo tras su salida de la cárcel apostó por tener un mejor año en el 2016. “Creo que este 2015 nos deja muchas cosas bonitas, muchas sorpresas y vamos a esperar el 16 bien positivo”, concluyó optimista. “Nunca es tarde para cambiar”.