La diabetes es una enfermedad con altos niveles de glucosa en la sangre, es decir la mayoría de los alimentos que consumimos se trasforman en glucosa o azúcar.
Los diabéticos son más propensos a padecer problemas cardiovasculares. La causa es debido a que la glucosa que se acumula en la sangre daña de manera progresiva los vasos sanguíneos, acelera el proceso de arteriosclerosis, y aumenta el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, como angina, infarto agudo de miocardio o muerte súbita.
La diabetes es una patología con un factor de riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, porque se evidenció que pacientes diabéticos corren el riesgo de padecer eventos cardiovasculares como aquellos que sufrieron uno con anterioridad.
El doctor Gabriel Waisman, Jefe del Servicio de Clínica Médica y de la Sección de Hipertensión Arterial del Hospital Italiano de Buenos Aires explicó que la enfermedad de diabetes es tratable, pero cuando los niveles de glucosa están controlados aumenta el riesgo de la enfermedad cardíaca, y de un accidente cerebrovascular.
La glucosa se acumula en la sangre dañando progresivamente los vasos sanguíneos, acelerando el proceso de arteriosclerosis, y además aumenta el riesgo de la enfermedad cardiovascular.
Los diabéticos pueden tener las siguientes afecciones que contribuyen a desarrollar enfermedades cardiovasculares, entre ellas presión arterial alta, colesterol anormal, triglicéridos altos, exceso de peso, azúcares en la sangre mal controlados y hábitos de fumar.
Este 14 de noviembre se celebra el día Mundial de la Diabetes con el objetivo de que las personas tomen conciencia global sobre esta enfermedad crónica.