Muchas mujeres sufren con los talones agrietados. Esto es un signo de deshidratación y falta de cuidado en esa zona. Este problema se caracteriza por afectar la capa externa de la piel, aunque a veces puede penetrar profundamente a nivel de la dermis y generar un intenso dolor.
Hoy en día existen muchos remedios caseros que pueden ayudarte a tratar la piel reseca en los talones y así recuperar su salud evitando que se convierta en un problema mayor.
Tratamiento de limón y glicerina
Este tratamiento natural ayuda a ablandar la piel del talón y reduce significativamente la resequedad que causa los talones agrietados.
¿Qué debes hacer?
Vierte en un recipiente grande una buena cantidad de agua caliente, sal gruesa, glicerina, jugo de limón y agua de rosas. Luego, sumerge los pies de 15 a 20 minutos.
Utiliza una piedra pómez para ablandar la piel reseca de los talones y facilitar la eliminación de durezas.
Prepara una mezcla de glicerina, jugo de limón y agua de rosas, y aplícala directamente sobre la piel endurecida de los talones. Colócate unos calcetines y déjalo actuar toda la noche.
Repite el mismo tratamiento por cuatro o cinco días seguidos.
Aceites saludables
Muchas veces, la falta de hidratación y la resequedad en la piel de los talones es la causa principal del agrietamiento. El uso de aceites vegetales esenciales es un gran remedio para hidratar y tratar este problema.
¿Qué debes hacer?
Utiliza una buena cantidad de aceite de coco o aceite de oliva para hidratar profundamente la piel reseca de tus talones.
Una vez lo apliques, colócate un calcetín de algodón toda la noche para que el aceite actúe mientras duermes.
Lavar por la mañana y repetir el tratamiento todos los días.
Mascarilla de plátano y aguacate
Esta mascarilla de plátano y aguacate ayuda a hidratar la piel de los talones agrietados y mejora notablemente su apariencia.
¿Qué debes hacer?
Prepara una pasta con un plátano y un aguacate maduros. Aplícate esta mezcla sobre la piel de los talones agrietados, déjala actuar por media hora y enjuaga.
Tratamiento de vaselina y zumo de limón
La vaselina y el limón actúan profundamente en la piel ayudando a ablandar las durezas y reduciendo notablemente el problema de talones agrietados.
¿Qué debes hacer?
Sumerge los talones en agua caliente con sal durante 15 o 20 minutos.
Seca bien los pies y luego unta los talones con una cucharada de jugo de limón y vaselina. Cubre los pies con calcetines de algodón y déjalo actuar toda la noche.
Miel para suavizar
La miel es un ingrediente con propiedades muy benéficas para la piel, que ayuda a hidratar y suavizar eficazmente.
¿Qué debes hacer?
Mezclar una taza de miel en un cubo de agua tibia. Sumergir los pies de 15 a 20 minutos y hacerse un masaje.
Exfoliante de avena
Este exfoliante natural de avena ayuda a suavizar la piel de los talones, ablanda la dureza y contribuye a una mejor apariencia del pie.
¿Qué debes hacer?
Prepara una pasta con algunas cucharadas de avena en polvo y un poco de aceite de jojoba.
Aplícala con suaves masajes circulares en la zona afectada, déjalo actuar 10 minutos y retíralo con agua tibia.