La modelo brasileña, Raquel santos, de 28 años, murió a causa de un paro cardiaco al someterse a una operación estética para corregir arrugas faciales.
Santos fue finalista de “Musa de Brasil 2015”, concurso de belleza que busca para la imagen del país sudamericano a una voluptuosa mujer.
Al parecer, el uso de sustancias para alterar la figura era algo habitual en la joven, ya que el esposo de la brasileña, Gilberto Azevedo, dijo que su fallecimiento está probablemente vinculado con el uso de dichas sustancias.
Santos, madre de dos pequeños de 7 y 13 años de edad, habría estado usando el Potenay, “Un estimulante utilizado en caballos para desarrollar los músculos”, señaló el esposo de la modelo durante el velorio, reportó el diario El Universal.
El químico que usaba la modelo se describe como: “Toníco reconstituyente, de uso en equinos, caninos y felinos”.
“Estaba fascinada por la imagen, el carnaval, el gimnasio. Siempre quería más. Yo creía que, bonita o fea, [era ] perfecta. Pero ella siempre quería más”, expresó su esposo.
Brasil está entre los países que lideran este emergente fenómeno; mujeres que se someten a procedimientos sin supervisión medica por tener un cuerpo perfecto, y en varias ocasiones, como Santos, les ha costado la vida.