Los abogados de Michelle Pugh, la estilista que mantuvo un tórrido romance con el músico y cantante Ozzy Osbourne, presentaron una demanda contra la hija del artista, Kelly Osbourne, en la que la acusan de haberla expuesta al odio y al ridículo de millones de personas al hacer público la relación con su progenitor.
Cuando Kelly se enteró de que su padre mantenía una relación extramarital, condenó en Twitter la «traición» y llegó a publicar el número de teléfono de Pugh para que le reprocharan su conducta.
En la demanda se acusa a Osbourne de difamación, imposición intencional de angustia emocional y la divulgación pública de la vida privada.
También se afirma que la demandante le envió una carta a la heredera de los Osbourne pidiéndole que detuviera sus tuits, pero que ni siquiera borró el post en que compartía el número telefónico de la estilista.
A pesar del escándalo que generó la revelación de la infidelidad, por ahora no queda claro si la esposa del músico, Sharon Osbourne, le ha solicitado el divorcio.