Una compañía de disfraces está vendiendo un conjunto que se basa en el robo que sufrió Kim Kardashian en París, donde supuestamente fue atada y forzada a meterse a una tina de baño.
La compañía Costumeish, que generó rechazo el año pasado por su disfraz de «tampón sangriento» basado en la presentadora de Fox News Megyn Kelly, nuevamente se enfrentó a las críticas por promover el violento incidente.
La descripción del disfraz no hace referencia directa a Kardashian, y en cambio describe de forma pasiva a la persona como alguien que ha «dedicado su vida a promover la decadencia, juventud y hedonismo de Estados Unidos