Lejos de los fármacos existen remedios caseros o técnicas ancestrales que vienen desde las abuelas y que podemos encontrar de forma sencilla y natural para combatir o tratar algunas enfermedades leves. A continuación siete recetas caseras infalibles que la ciencia comprobó que dan resultados.
La mezcla del vinagre blanco con el alcohol en partes iguales forma una combinación que, derramada en gotas, previene la otitis en los casos menos severos. Además, la mezcla resulta útil para frenar la aparición de hongos y bacterias que provocan la otitis externa.
Gárgaras para los resfriados,es una de las técnicas debatidas entre el 2002 y 2003,por la Escuela de Salud Pública de Kyoto, Japón,en la que se realizó un estudio práctico con 400 personas que fueron evaluadas un año después de la práctica del mismo.
Este estudio reveló que realizar a diario gárgaras con agua de la canilla disminuía las posibilidades de contraer infecciones por vías respiratorias como catarros o gripes.
Un studio realizado en la La Universidad de Exeter, Inglaterra demostró que tomar unas gotas de la raíz de Jengibre ayuda a disminuir las náuseas a las mujeres durante la etapa del embarazo, este mismo estudio se aplica para los pacientes que están siendo tratados bajo la quimioterapia
Por su parte, la Organización Mundial para la Salud indicó que es beneficioso para el organismo la ingesta de miel. Durante un estudio que realizó esta organización en 2012 a 300 participantes, los resultaron determinaron que tomar una cucharada de miel en las noches disminuye los ataques de tos a sí como mejoras las condiciones del sueño.
Un estudio médico determinó que la cinta adhesiva para congelar verrugas es efectivo en un 60%. El mismo es usado para tratar molestias de la piel.
En el año 2000 un estudio determinó la eficacia de la sopa de pollo para los resfriados. Al parecer el pollo tiene unas condiciones para disminuir los niveles de inflamación que se producen durante los virus de gripe.
El aplicar hielo durante los dolores de cabeza o la migraña según un estudio que se llevó a cabo con más de 50 personas arrojó que la puesta del frío durante la temporada de malestar lo puede disminuir d forma considerable.