Donald Trump pronunció un discurso sobre su propuesta en política de inmigración en Phoenix, Arizona —un estado con alta población hispana—, horas después de una sorpresiva visita a México que terminó con controversia y versiones encontradas. Y lo que dijo en EE.UU. fue distinto a lo que dijo en México, al menos en líneas generales.
Trump dijo en la rueda de prensa después del encuentro con Enrique Peña Nieto que no discutieron quién pagará el muro que él propone para frenar la inmigración ilegal, y después el mandatario de México dijo en Twitter que él sí le dijo a Trump que México no pagará.
En Phoenix, Trump insistió en que construirá un muro en la frontera con México y dice que será «hermoso y poderoso».
«Aún no lo saben, pero México pagará 100 % del muro», dijo.
Trump además anunció que acabará con las ciudades santuario y que habrá examen extremo de revisión para las personas que provengan de ciertos países.
«Solo ingresarán a EE.UU. personas confiables y con solvencia económica», dijo Trump, al referirse al fortalecimiento del sistema inmigratorio, incluyendo revisar los beneficios y expulsar a los peligrosos.
