Hay varias formas de evitar un embarazo no deseado, y muchos de esos métodos cuentan con sustancias que modifican o inhiben ciertos procesos naturales en el sistema reproductor femenino, haciendo posible que el óvulo no sea fecundado; veamos cómo funcionan los métodos anticonceptivos hormonales para que este proceso no se lleve a cabo.
¿Cuáles son los métodos anticonceptivos hormonales?
Millones de mujeres en todo el mundo recurren cada día, mes o año según el método escogido a la anticoncepción hormonal con el objetivo de evitar el embarazo, aunque también pueden utilizarse como forma de tratamiento en algunos trastornos como la menorragia, el síndrome de ovario poliquístico, acné, endometriosis y síndrome premenstrual. Encontramos diversas formas y presentaciones entre alternativas posibles, como por ejemplo:
Píldora anticonceptiva oral
Píldora de progestágeno o mini-píldora
Parches anticonceptivos
Inyecciones
Implantes
Anillo anticonceptivo vaginal
Dispositivo intrauterino DIU
Píldora del día después
La función de los anticonceptivos hormonales
Básicamente, lo que hacen es impedir la liberación del óvulo que tiene lugar cada mes. Además, los anticonceptivos hormonales generan un efecto viscoso o denso del moco que se encuentra en el cuello uterino; de este modo, el espermatozoide no puede penetrar en la matriz.
Elección del método
Según padezcas o no de ciertas enfermedades, tu médico te indicará qué tipo de método anticonceptivo hormonal es mejor para tu caso.
Según el que escojas, este podría contener una o más hormonas. Por ejemplo, las píldoras combinadas tienen dos: el progestágeno y el estrógeno. Su uso es muy común, se toma cada mes durante 21 días, descansando siete y luego volver a empezar el ciclo.
Luego, encontramos la píldora de progestágeno, con la que no es necesario hacer pausas, se toman siempre y a la misma hora cada día. Hay otros métodos como los parches o los implantes, que son de liberación prolongada.
Anticonceptivos hormonales y sus efectos secundarios
Como la mayoría de los medicamentos, también tienen efectos secundarios; si bien es necesario conocer qué tipo de anticonceptivo se ha escogido, estos afectarán en mayor o menor medida según cada persona. Los más habituales son:
Anticonceptivos hormonales con estrógenos incrementan el riesgo de:
Cáncer de mama
Cáncer de cuello uterino
Trombosis venosa profunda
Píldora anticonceptiva oral combinada puede ocasionar más riesgo de:
Ataque al corazón
Accidente cerebrovascular
Anticonceptivos hormonales con progestágeno podrían causar:
Dolor de cabeza
Cambios de humor
Sensibilidad en los senos
En su gran mayoría los anticonceptivos hormonales producen:
Sangrado irregular
Sangrado o manchado
Sin embargo, a pesar de que la lista de efectos secundarios de los métodos anticonceptivos hormonales puede ser bastante más amplia, dependiendo del que se haya elegido, muchas mujeres recurren a ellos por su alto porcentaje de efectividad en cuanto a prevención del embarazo se refiere.
Fuente: Imujer