La Fiscalía de Guatemala imputó hoy oficialmente a Roberto Barreda, hijo de la expresidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de este país, Beatriz de León, seis delitos, entre ellos el de feminicidio, por la desaparición y supuesta muerte de su esposa, Cristina Siekavizza, en julio del 2011.
Durante la audiencia de primera declaración celebrada en un Juzgado de Alto Riesgo, el fiscal del caso, Héctor Canastuj, leyó los cargos judiciales contra Barreda, quien fue capturado el pasado 8 de noviembre en la ciudad mexicana de Mérida (Yucatán) y deportado a Guatemala.
Canastuj explicó que aún cuando no se ha encontrado el cadáver de la mujer, es imputable el delito de feminicidio con las pruebas científicas y de reconstrucción de los hechos realizadas por el Ministerio Público (MP).
En otros países como España y Argentina, refirió, se han realizado juicios parecidos sin que haya tenido el cuerpo de la víctima.
Además, Barreda, que permaneció prófugo de la ley por más de dos años con ayuda de amigos y familiares, entre ellos su madre Beatriz de León, expresidenta de la CSJ y del Organismo Judicial, según el fiscal, cometió los delitos de secuestro, asociación ilícita, violencia contra la mujer, obstrucción a la justicia y maltrato contra personas menores.
En la acusación formal, Canastuj aseguró que Barreda, quien se abstuvo de declarar, ejerció violencia psicológica y económica contra su esposa desde mayo de 2006 hasta el 6 de julio de 2011, fecha en la que le propinó golpes hasta causarle la muerte en la casa donde vivían.
La muerte de Siekavizza se produjo en presencia de los hijos Roberto José y María Mercedes, que tenían 7 y 3 años de edad, respectivamente, sostuvo.
Canastug añadió que luego del hecho, Roberto Barreda, cuyo padre del mismo nombre también fue magistrado de la CSJ, desapareció el cuerpo de su esposa, y pidió al juzgado ligarlo al proceso por los seis delitos cometidos.
El fiscal precisó que Barreda expuso a sus hijos al peligro al huir con ellos hacia México en agosto de 2011 para evitar que sus testimonios fueran utilizados en el proceso de investigación.
Durante la diligencia judicial, presidida por el juez Gervi Sical, también salieron a luz detalles sobre las agresiones y amenazas de muerte que sufrió Cristina Siekavizza de parte de su esposo y que de acuerdo con Canastuj, fueron presenciadas por la empleada doméstica, Olga Petrona Say, la testigo protegida del caso.
La desaparición y supuesta muerte de Cristina ha tenido relevancia y una gran cobertura mediática por la presunta participación en el hecho de la expresidenta de la CSJ, que está sindicada de obstrucción a la justicia, y que se encuentra en libertad bajo fianza.
Barreda, con un chaleco antibalas, permaneció en una pequeña cárcel ubicada en la sala de audiencias de la torre de tribunales, desde donde escuchó las acusaciones en su contra.
Los hijos de la pareja, que fueron rescatados por la Procuraduría General de la República de México (PGR), se encuentran en custodia temporal de sus abuelos maternos, Juan Luis Siekavizza y Angelis Molina.
(FUENTE EL LISTIN DIARIO)
