Luego de dar a luz, el 80% de las mujeres sufre profundos cambios de humor y el 10%, depresión. Esta realidad puede deberse en parte a los grandes transformaciones hormonales. Ahora bien, ¿es posible atenuar los cambios de humor yprevenir la depresión postparto?
#1 Sé realista
Convertirse en mamá es una de las instancias más significativas en la vida de toda mujer. Este hecho hace que, muchas veces, las mujeres tiñamos de perfección e idealismo la idea de ser mamás. Ahora bien, baja a tierra: no todo será color de rosas. Es probable que no puedas descansar y tengas mucho que hacer. Mentalízate: ten expectativas más realistas.
#2 Relájate
Muchos estudios han demostrado que los recién nacidos entablan vínculos más estrechos con mamás relajadas. Según Diane Stanford, las mujeres que dedican al menos 15 minutos diarios a una práctica relajante (como meditar, respirar o realizar yoga) son capaces de afrontar mejor el estrés que la maternidad conlleva.
#3 Duerme bien
Dar a luz tiene la extraña habilidad de convertir las cosas que antes eran sencillas en terriblemente complicadas. Un ejemplo: descansar. Muchas investigaciones ya han comprobado que un buen descanso es fundamental para disminuir los riesgos de depresión. Por ello, trata de dormir al menos 7 horas. Aprovecha cuando tu bebé se haya dormido y, si aún así no puedes descansar lo suficiente, pídele ayuda a amigos o familiares.
#4 Haz ejercicio
Un estudio realizado con más de 1.000 madres evidenció que aquellas que se ejercitaban antes y después del parto, se encontraban mejor emocionalmente y eran más sociables de las que no lo hacían. De acuerdo a la psicóloga Karen Rosenthal, salir a caminar, tomar aire fresco y estar en contacto con la naturaleza son excelentes medidas para prevenir la depresión postparto. Pero ten cuidado: no te esfuerces en realizar ejercicios muy agotadores; bastaŕá con que estés en movimiento.
#5 Concibe la maternidad como un trabajo
Cuando empezamos a trabajar, sabemos que al principio nos depararán días estresantes y agotadores. Ahora bien, no nos mentalizamos de la misma manera cuando estamos por ser mamás. Esto es un error: debes considerar a lamaternidad como un trabajo de 24 horas. De esta forma, asumirás tu nuevo rol con más responsabilidad y le concederás la importancia que merece.
#6 No esperes ser la madre perfecta
El perfeccionismo es el camino directo a la depresión. Esta forma de ser hace que te fijes expectativas imposibles de satisfacer y te lleva, inevitablemente, a sentirte culpable. Por eso, permítete equivocarte. Todas las madres lo han hecho; basta que converses con cualquier de ellas para constatarlo. Recuerda: para que tu hijo nazca bien, no tienes que ser la madre perfecta, basta con que seas feliz.
Fuente Imujer