El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, reconoció la derrota de su movimiento Alianza País (AP) en la elección de las alcaldías de Quito y Guayaquil, las principales ciudades del país, según sondeos a boca de urna difundidos tras el cierre de las votaciones celebradas hoy.
Según la firma Market, en Quito ganó el candidato opositor Mauricio Rodas con el 58,07 por ciento de votos, frente al 39,61 por ciento del oficialista Augusto Barrera, actual alcalde que iba por la reelección.
En Guayaquil, el alcalde opositor Jaime Nebot, que también iba por la reelección, venció con el 60,2 por ciento a la oficialista Viviana Bonilla, que obtuvo el 36,5 por ciento, de acuerdo con un sondeo de la misma firma.
Correa, en un acto en la sede de Alianza País en Quito, agradeció a sus compatriotas y descartó que su proyecto de «Revolución Ciudadana» que ha aplicado en el país, haya sido derrotado, pese a que en la campaña electoral advirtió reiteradamente del riesgo para este proyecto político si el oficialismo perdía la alcaldía capitalina.
«Hemos tenido un importante revés en la capital, que habrá que analizar», dijo Correa al admitir que esa ciudad «es importante por cuestiones de gobernabilidad».
Destacó, asimismo, el «amplio triunfo» de Alianza País en la Prefectura (representación provincial) de Pichincha, cuya capital es Quito, donde el oficialista Gustavo Baroja ganó la elección en la jurisdicción con más del 58 por ciento de los votos, según los sondeos.
También puso en relieve el resultado alcanzado por su candidata a la alcaldía de Guayaquil, Viviana Bonilla, una joven profesional que, pese a perder, obtuvo resultados «extraordinarios», según Correa.
Los reveses encajados en esta jornada significan que «nada está ganado, lo tenemos que ganar día a día», remarcó Correa.
De su lado, el alcalde Barrera también aceptó la derrota y deseó «éxitos» a Rodas, que, de confirmarse los resultados preliminares, se hará cargo del municipio.
«Hoy es un día triste», pero «no necesariamente es uno de esos días duros» que ha afrontado la patria, reconoció Barrera, que agradeció el «enorme apoyo» de los quiteños a Alianza País, formación que conserva «un porcentaje sólido y robusto» de apoyo en la ciudad.
«Con toda humildad, estaremos totalmente vigilantes en este proceso de transformación» que se ha dado en Quito durante su administración, indicó Barrera al remarcar que no permitirá que «se den pasos atrás» en la gobernabilidad alcanzada en la ciudad.
Pidió a los capitalinos, tras haber concluido el proceso electoral, bajar «las armas de la mentira y el odio» y seguir en la construcción «del Quito que queremos».
Finalmente, el alcalde Barrera asumió la responsabilidad de los eventuales errores que pudieran haberse dado en la gestión municipal y en el desarrollo de la campaña electoral oficialista.
(fuente el diario libre)
