Bombarderos estadounidenses realizaron, este sábado, pruebas de tiro en la frontera coreana luego de que Pyongyang concretara esta semana una prueba de misil intercontinenal, informó el ministerio de Defensa surcoreano.
Como parte del ejercicio, dos B-1B Lancers desplegados en la base aérea Andersen, en Guam, se acercaron de la frontera terrestre y marítima con Corea del Norte, antes de dar media vuelta.
Los bombarderos sobrevolaron el Mar del Este (Mar de Japón) y tras aproximarse a la frontera que divide a las Coreas, se unieron a cazas surcoreanos F-15K y F-16 en la provincia de Gangwon. Allí ensayaron con fuego real ataques a instalaciones clave norcoreanas, según los reportes.
El día de la Independencia de Estados Unidos, 4 de julio, Corea del Norte lanzó con éxito un misil balístico intercontinental con capacidad para alcanzar a Alaska.
La televisión estatal norcoreana divulgó imágenes de la prueba, llamada “regalo a Estados Unidos”. La movida incrementó la tensión entre las partes, que ya va en escalada desde hace meses.