Las aplicaciones se han convertido en un negocio muy rentable para muchos, ahora parece que cualquiera puede construir un imperio desarrollando la suya propia, Chad Mureta es uno de ellos. Este empresario, escritor y consultor es el CEO de la App Empire y ha desarrollado y comercializado más de 46 aplicaciones que se han descargado más de 35 millones de veces en todo el mundo. Pero este agente inmobiliario no sabía que nada de esto ocurriría hasta el 2009 cuando regresando a su casa por una carretera de Charlotte, Carolina del Norte sufrió un accidente de tráfico. En su anterior vida trabajaba dieciocho horas y cobraba un sueldo miserable y su ambición despertó al ritmo que él lo hacía en el hospital.
A lo mejor es la primera vez que lees sobre Chad Mureta, pero lo más probable es que hayas utilizado alguna de sus aplicaciones como Emoji (la aplicación de emoticonos) o la de seguridad con una huella digital. Todo empezó con un accidente de tráfico, al despertar recibió un correo electrónicoen su iPhone. «Cuando estaba en el hospital con mi ropa rota en mil pedazos, estaba mi iPhone a mi lado con el 12 por ciento de la batería. Y entonces un amigo me visitó en el hospital y me mostró un artículo sobre esta nueva fiebre de aplicaciones que te hacen de oro.» Fue en ese momento cuando pensó para sí mismo : «Tengo un iPhone aquí, es mi oportunidad.» En auqel instante empezó lo que ahora se conoce como un imperio, todo desde una cama de hospital. Tenía una idea y quería luchar por ella pero no sabía nada acerca de programar y le tuvo que pedir dinero prestado a su padrastro. En menos de tres meses, después de haber concebido su primera idea, la aplicación se presentó en la App Store y alcanzó el número 27 en el 2011 con una compensación económica de más de 600.000 dólares. El primer mes ganó 12.000 dólares con los que recuperó su inversión inicial de 1.800 dólares. En seis semanas ideó seis aplicaciones más y su empresa con apenas dos meses de vida facturaba 30.000 dólares al mes, más tarde los ingresos de la compañía alcanzaron los 120.000 dólares al mes. En los dos años siguientes, creó y vendió tres empresas con las que recaudó millones. Mureta asegura que el 80% de los negocios dependen de la creatividad del dueño y el 20% al conjunto de habilidades.
En el 2012 publicó el libo, App Empire, se trata de una crónica de la transformación de Mureta. The Seattle Post-Intelligencer que describe el libro como «un maravilloso libro que explica cómo hacer un montón de dinero de la formulación, construcción y promoción de aplicaciones populares.»