El hombre detenido este martes por realizar disparos en una escuela primaria de Decatur, Georgia, tenía en su poder 500 cartuchos, ha informado este miércoles la Policía. El incidente tuvo un final feliz: ningún alumno resultó lesionado, después de que un empleado del centro convenciera al hombre para que se entregara.
El detenido, Michael Brandon Hill, ya se ha presentado ante el juez del condado de DeKalb, según el diario USA Today. Las autoridades tratan de determinar por qué Hill hizo al menos seis disparos con un rifle de asalto en la escuela primaria Ronald E. McNair Discovery Learning Academy, en Decatur, en las inmediaciones de Atlanta. Aunque los agentes también realizaron disparos, nadie resultó lesionado. La contadora de la escuela, Antoinette Tuff, fue el responsable de calmar al hombre armado y convencerle para que se rindiera. Hill le dijo que acababa de dejar una medicación y que iba a morir, pero que antes mataría a algunos policías.
La contadora de la escuela, Antoinette Tuff, fue el responsable de calmar al hombre armado y convencerle para que se rindiera. Hill le dijo que acababa de dejar una medicación y que iba a morir, pero que antes mataría a algunos policías. Los investigadores han declarado a una cadena local que, en el momento de su detención, el acusado dijo «Lo siento, he dejado mis medicamentos». Varias armas le fueron confiscadas.
Hill, que tiene 20 años, enfrenta cargos por enfrentarse a los agentes, amenaza terrorista y posesión ilegal de armas. Había sido detenido a principios de año por tratar de matar a su hermano. Los alumnos han vuelto a clases, pero en un plantel cercanoLa escuela Ronald E. Mcnair (llamada así en honor a uno de los astronautas que murió a bordo del Challenger) tiene 870 alumnos que cursan hasta quinto grado. Todos han vuelto a clases este miércoles, pero en un plantel cercano. La policía ha explicado que, aunque la escuela tiene un sistema para dejar entrar solo a personas autorizadas, Hill se coló detrás de alguien que tenía permiso.