Asediado por los paparazzis y los fans, Justin Bieber abandonó la gala del MET para luego dirigirse a la fiesta de Rihanna. Sin embargo, el jovencito de 21 años no quiso despedirse de los presentes sin manifestar en voz alta su admiración por su ex Selena Gómez, quien también atendió la función llevando un vestido largo blanco, totalmente ajustado al cuerpo, y con un adorno de flores recogiéndole el cabello.
“Selena se veía bellísima en la gala del MET”, le gritó Bieber a los paparazzis de TMZ mientras su SUV negra se alejaba del lugar.
Eso sí, después de manifestar a los cuatro vientos su amor por la actriz, el cantante se fue de rumba con Rihanna y Leonardo DiCaprio, pero se rumora que Selena rompió hace poco con su novio, y que también atendió la misma fiesta de Bieber después de la gala. ¿Reconciliación a la vista?