Kanye West acaba de dar una nueva muestra de extravagancia, ya que en vez de regalar a Kim Kardashian un regalo de boda definido por el glamour y la sofisticación, ha decidido agasajarla con la adquisición de 10 restaurantes de la franquicia Burger King que se encuentran repartidos por toda Europa.

«A Kanye siempre le ha encantado jugar con el factor sorpresa, por lo que nadie se esperaba que se luciera con un regalo tan original para demostrar su amor por Kim. La verdad es que todo tiene sentido, porque Kim ya tiene todas las joyas y vestidos que una chica podría desear. Es mucho más sensato ayudarla a expandir sus negocios y a meter cabeza en un sector muy lucrativo», reveló una fuente al diario Daily Star, quien recuerda además que Kanye siempre ha tratado de apartar a su prometida de la televisión.

Sin embargo, la decisión tomada por el músico tampoco debería resultar tan impactante si se tienen en cuenta sus últimos movimientos empresariales, sobre todo el hecho de que a principios de año se hiciera con la propiedad de varios locales en Chicago que, siguiendo sus instrucciones, se han especializado en la elaboración de sabrosas carnes a la parrilla. De esta forma, el cantante estaría planeando ya unificar los negocios gastronómicos de los dos enamorados dentro de una misma compañía matriz.

«Kanye sabe perfectamente que la industria de los restaurantes puede darles grandes beneficios y asegurar el estilo de vida tan exclusivo que los dos llevan. Sus restaurantes de Chicago han demostrado ser todo un éxito entre el público más selecto de la ciudad, y aunque los productos de Burger King no entran dentro de la misma categoría, el hecho de que sea una cadena internacional podría intensificar aún más el perfil mediático de Kim. Todo está listo ya para que la pareja centre su actividad profesional en este campo», indicó el mismo informante.

fuente Univision