Te invitamos a cuidar la piel y el pelo con arcilla blanca, un tratamiento de belleza natural. Económica, ecológica, pura y de una gran finura, la arcilla blanca es conocida por sus cualidades suavizantes y limpiadoras. Se suele utilizar en cuidados (excepcionales) para la belleza de la piel y del cabello.
Llamada también rasul, la arcilla blanca (o gris) extraída de las montañas de Marruecos, se presenta en forma de motas sólidas de color gris claro o gris oscuro, de polvo (como la arena) o de plaquetas. Mezclada con agua templada, esta arcilla gris se infla para transformarse en una pasta fluida muy suave.
La arcilla blanca
Reconocida por favorecer la tonicidad de la piel –incluso de las pieles más sensibles y alérgicas–, la arcilla gris regula la secreción del sebo, cierra los poros y elimina las impurezas. Por lo tanto, es un producto de belleza ideal para pieles grasas, con granos y puntos negros, sobre las que actúa como un peeling muy suave.
La arcilla gris también tiene un efecto tensor (lifting natural), reafirmando, y por lo tanto es un cuidado antiarrugas y antiedad. La arcilla blanca suaviza, purifica y desincrusta la piel, embelleciendo el rostro sin agredirlo.
Mascarilla de arcilla para la cara
Sobre una piel perfectamente desmaquillada, se aplica la arcilla con ayuda de un pincel en capas espesas, sobre la cara y sin olvidar el cuello. Se deja actuar unos 10 minutos y luego se enjuaga con agua templada.
En pieles frágiles se pueden añadir a la arcilla algunas gotas de aceite de argán, así como una gota de aceite esencial de rosa, de geranio o de neroli. Pero sólo se deben añadir el aceite de argán y el aceite esencial en el momento en el que la arcilla esté perfectamente mezclada con el agua.
Para una mayor eficacia, se puede realizar un baño de vapor sobre el rostro antes de aplicar la mascarilla de arcilla.
La arcilla blanca sobre el cuerpo
La arcilla gris, hipoalergénica, puede hacer las veces de jabón, exfoliando las células muertas. De esta forma, limpia suavemente y profundidad, dejando la piel suave, satinada y regenerada. Lo ideal es reemplazar el gel de ducha por arcilla gris. Las células muertas y la suciedad se eliminan con el agua al enjuagar.
Se debe desleír la arcilla en un bol con agua templada hasta que forme una pasta manejable que se extiende por todo el cuerpo. Se deja reposar algunos segundos y luego se enjuaga abundantemente. Si la piel está muy seca, se pueden añadir unas gotas de aceite de argán.
La arcilla blanca para el pelo
Mezclada con agua templada hasta obtener una pasta fluida, la arcilla gris puede convertirse en un champú que no sólo limpia y desengrasa perfectamente el pelo, sino que lo fortalece, le devuelve su brillo, flexibilidad y volumen sin agredirlo.
En conclusión, la arcilla blanca elimina la caspa y regula el cabello grasiento sin irritar las glándulas sebáceas y protegiendo la queratina.
Fuente Imujer
