Cuatro años después del trágico accidente que le costó la vida a la estrella deFast & Furious, Paul Walker, y a su asesor financiero, Roger Rodas, la hija del actor llegó a un arreglo económico con Porsche.
Según reportó Los Angeles Times, Jeff Milam, el abogado de Meadow Walker, quien tenía 16 años cuando demandó a la automotriz en el 2015, comentó: “El asunto se resolvió a satisfacción de todos los involucrados”.
La querella de la joven estaba basada en la premisa de que su padre habría sobrevivido el accidente ocurrido en noviembre de 2013, pero que murió quemado al no poder soltar su cinturón de seguridad para escaparse del automóvil deportivo.
La demanda también indicaba que el fuego pudo ser causado por otro defecto de fábrica: los inyectores de goma no eran desmontables en caso de accidente, lo que hacía que corriera el flujo de combustible.
Investigadores del accidente llegaron a la conclusión de que el factor determinante en la muerte de la estrella y su acompañante fue la velocidad a la que viajaban que, según los analistas, podría haber llegado a unos 151 km/h,aunque los abogados de los Walker siempre aseguraron que era de entre 101 y 114 km/h. La velocidad límite de esa zona en Valencia, Santa Clarita, California, es de 45 km/h.
El 16 de octubre la joven habría finalizado el litigio con Porsche, aunque es confidencial, se supo que parte importante de éste era que se desestimara el caso de muerte por negligencia.
Además de la hija del actor, su padre, Paul William Walker III, también llegó a un acuerdo con el fabricante.