¿Quién podría pensar que un niño sufre de insomnio? Sin embargo, existen casos de niños a los que les cuesta conciliar el sueño por las noches o que, al cabo de unas horas de dormidos, se despiertan.
Si tu hijo se acuesta temprano y tiene por delante 10 horas de sueño para descansar bien pero no lo consigue, presta atención a lo que sigue. Tal vez tenga problemas de insomnio.
Síntomas de que un niño sufre de insomnio
Puedes darte cuenta de que tu hijo está teniendo malas noches de sueño sin que él te lo diga. Presta atención a los pequeños cambios en su conducta, éstos suelen presentarse como consecuencia de la falta de sueño.
Demora en quedarse dormido.
Ronca por las noches.
Se muestra irritable.
Tiene cambios de humor.
Es hiperactivo.
Puede verse deprimido.
Se lo percibe agresivo.
Su capacidad de atención es reducida.
Tiene problemas de memoria.
Causas del insomnio en la infancia
Los niños de entre 6 y 12 años de edad necesitan dormir entre 10 y 11 horas cada noche. Pero si se quedan hasta tarde mirando televisión, jugando o haciendo cualquier actividad, esto puede causarles dificultades para dormir. Pero esos no son los únicos motivos por los que tu hijo puede tener insomnio, existen otros:
Consume cafeína.
Sufre de estrés.
Tiene apnea obstructiva del sueño.
Toma medicamentos para tratar TDAH, antidepresivos, corticosteroides y anticonvulsivos.
Tiene asma.
Padece de eczema.
Está deprimido.
Sufre de ansiedad.
Tiene el síndrome de las piernas inquietas.
Tiene algún trastorno neurológico (autismo, retraso mental y síndrome de Asperger).
Cómo se trata el insomnio infantil
Lo más conveniente es buscar el origen del insomnio para descartar problemas médicos o psicológicos.
Aunque hay muchos padres que esperan que desde un principio sus hijos sean medicados para tratar el problema, esto no es lo ideal ya que, por ejemplo, si un niño sufre de asma y tose por las noches, es normal que ésta afección le impida dormir con normalidad. En éste caso, debe ser tratado el asma, lo más seguro es que una vez que la enfermedad se trate el insomnio desaparezca.
Algunos tratamientos que no implican fármacos a la hora de tratar el insomnio infantil consisten en:
No leer o ver televisión una o dos horas antes de ir a dormir.
Establecer una rutina en la hora para ir a dormir y para despertarse que sea igual durante los 7 días de la semana.
Seguir técnicas de relajación muscular y de respiración.
Evitar la cafeína.
Hacer actividad física a diario.
Un niño que tiene una vida normal y saludable no tiene motivos para tener problemas para dormir; si los tiene es un indicativo claro de que algo está funcionando mal, por lo que es primordial consultar con su pediatra.
Fuente: Imujer