Maisie Richardson-Sellers (The Originals), que tendrá un papel en la próxima película de Star Wars, ha fichado además por el nuevo piloto de ABC, Kings and Prophets.
Escrito por Adam Cooper y Bill Collage y dirigido por Jeffrey Nachmanoff, el piloto será filmado en Sudáfrica. El proyecto, de ABC Studios, se describe como una saga épica bíblica sobre la fe, la ambición y la traición contada a través de los ojos de un rey cansado (Roy Winstone), un profeta poderoso y resentido y un pastor joven ingenioso en curso de colisión con el destino. Richardson-Sellers, dará vida al personaje de Michal, la hija menor del rey Saul (Winstone).
Por otro lado, la misma ABC ha anunciado otros fichajes para sus pilotos y así, Julie Ann Emery (Better Call Saul) y Brad Carter (Ascension) se han unido al elenco de la comedia familiar sin título protagonizada por Johnny Knoxville, escrita por Victor Fresco y dirigida por su hermano Michael Fresco.
Narrado por Knoxville y basado en su vida el piloto seguirá sus hazañas desde los 12 años con un Johnny navegando la “cultura fuera de la ley” de su familia y de su pueblo natal y documenta las experiencias de la infancia que le inspiraron para convertirse en uno de los grandes bromistas de una generación.
Emery será Genevieve, madre descaradamente narcisista al cuidado de Johnny. Carter, será “Jukebox” Johnson Jr., el empleado en la tienda de neumáticos de su padre Ray, quien obtuvo su nombre por el robo de una máquina de discos justo en frente de la tienda.
Efren Ramirez (Napoleón Dynamite) ha conseguido un papel en la comedia sin título piloto de Judah Miller. El proyecto se centra en una madre ganadora del premio Tony (Megan Hilty) y un padre cerebral con aversión al riesgo que son bendecidos con un hijo que es un atleta competitivo por naturaleza por lo que se verán obligados a entrar en el competitivo mundo de los deportes juveniles. Ramirez, será José Luis uno de “The Three Bears”-tres hombres de gran tamaño (de diferentes tamaños) que son gays y el coro griego de Irene. Ellos son la única cosa en los suburbios que recuerdan a Irene sus días viviendo en Manhattan.
