Aunque era un secreto a voces, lo cierto es que las imágenes de Gabriel Soto e Irina Baeva juntitos y de la mano han provocado un gran revuelo. Si bien su romance ya había sido destapado, ambos lo negaron e incluso nunca más se les volvió a ver juntos fuera del escenario y el marco profesional.
Pero esta semana la verdad salió a la luz y se dejaron ver de lo más felices y enamorados en las calles de Los Ángeles, donde la actriz acudía a un importante casting en Hollywood. Como era de esperar, estas imágenes han producido todo tipo de reacciones, algunas mejores que otras.
La parejita, que como es normal luce de lo más feliz y acaramelada, ha dejado un triste sentimiento en otra persona. Se trata de Rosalba Ortiz, madre de Geraldine Bazán, con quien el artista estuvo casado durante más de una década y con quien tiene dos preciosas hijas.
La abuelita materna ha hecho unas declaraciones al programa Suelta la sopa e incluso ha derramado alguna que otra lagrimita al comentar las imágenes del que fuera su yerno con su nueva ilusión.
“Si Gabriel rehace su vida y sale con una persona hoy, mañana con otra, es su vida”, apunta la mamá de la actriz en eentrevista a este programa. “A mí lo que me interesa es la felicidad de mi hija, de mis nietas, de mi familia. Si esto ocasiona un poco de dolor es porque siempre una relación que se fractura, pues sí, te duele”, sigue apenada.
Por otro lado, mostró su inconformidad por los fuertes ataques que recibió Irina por mantener una relación con Gabriel. “No tienen que expresarse así de ninguna mujer pues todas las mujeres merecemos un respeto”, dijo sincera la madre de Geraldine. A lo que añadió que tanto su hija como el actor eran libres y podían estar con quienes quisieran.
Sobre el que un día fuera parte importate de su familia, sólo tuvo palabras de cariño y afecto, e incluso alguna que otra lagrimita. Para Rosalba Gabriel “es un buen hombre” y “una buena persona”.