El campeón olímpico estadounidense Michael Phelps se pronució sobre el escándalo que protagonizó su compañero de equipo Ryan Lochte en los Juegos de Río de Janeiro, cuando su denuncia de que había sido asaltado resultó ser falsa.
“Ryan y yo hemos sido amigos toda la vida lo conozco de los entrenamientos y sé que está pasando por momentos muy difíciles, conozco el sentimiento, porque lo he vivido antes”, dijo este lunes en el programa Today (NBC) Phelps, quien hace unos años protagonizó sus propios escándalos tras ser fotografiado fumando marihuana y en otra ocasión ser arrestado por conducir ebrio.
“Espero que esto lo haga mejor como persona, lo he visto un par de veces y sé que él madurará mucho más con esto que vivió”, agregó el nadador de 31 años.
Lochte se convirtió en el protagonista involuntario de los últimos días de las Olimpiadas cuando denunció en una entrevista con la NBC que había sido asaltado a mano armada por unos ladrones que se hicieron pasar por agentes de policía cuando regresaba de fiesta con unos compañeros.
Lo que parecía un golpe a la reputación de Río se transformó en dolor de cabeza para el nadador cuando las autoridades averiguaron que el robo no había existido y que en realidad se trató de un enfretamiento del deportista, que iba ebrio, con los empleados de una gasolinera.
Como resultado, Lochte acabó pidiendo perdón por haber «omitido detalles» en sus explicaciones del suceso y sus patrocinadores lo abandonaron. Además, enfrenta cargos en Brasil por presuntamente denunciar un delito falso.