El actor mexicano Mario Almada, murió la noche del martes 4 de octubre en Cuernavaca, México, a causa de un paro respiratorio. Almada, quien era conocido por sus papeles de justiciero en cintas de acción, tuvo una muerte tranquila y rodeado de sus familiares, según declaró Teresa Rivero, su nuera, al periódico El Universal. Tenía 94 años de edad.
Durante su extensa carrera en el cine -que se extendió por más de siete décadas- Almada protagonizó más de 300 filmes, la mayoría de ellos del género western. El natal de Huatabampo hacía parte de una familia de actores y productores que incluye al también actorFernando Almada.
Tras actuar como extra cuando era niño, Mario regresó al mundo del cine en la década de los 60 trabajando como productor y guionista. En 1965 sustituyó al actor Bruno Rey en la cinta Los Jinetes de las Bruja, iniciando así su carrera como actor.
Gracias a su actuación en el filme Todo por nada (1969) obtuvo su primer premio Diosa de Plata, otorgado por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas. El Tunco Maclovio le valió su segundo galardón en la categoría de actor de reparto en 1971. En el 2013 le fue otorgado el Ariel de Oro por su trayectoria artística.
Almada no dejó de trabajar en vida, por los que sus créditos incluyen películas lanzadas este año, entre ellas Sangre de Traficante y El Precio del Poder.
Según indicaron sus familiares a los medios, los restos del actor serán cremados.
