Nueva York – La residente de Manhattan Kate Matrosova murió congelada, pero no por las gélidas temperaturas que azotan a la Gran Manzana, sino durante una excusión que realizaba sola en la montaña Blanca en New Hampshire.
La excursionista de 32 años había sido declarada desaparecida el domingo luego que se aventuró a subir la montaña donde en las noche se registran temperaturas de 30° por debajo del punto de congelación y ráfagas de viento de hasta 100 mph.El cuerpo de Kate fue encontrado el lunes entre la montaña Madison y la montaña Adams, y se informó que la causa de la muerte fue la exposición a las bajas temperaturas.
La mujer había activado un dispositivo de emergencia que manda señales con sus coordinadas a los rescatistas, pero estos no lograron localizarla a tiempo.La mujer trabajaba en una firma bancaria en Midtown en Manhattan y su esposo es un vicepresidente en JPMorgan Chase.El plan original de la alpinista era escalar la montaña Washington, que es el punto más alto del Northeast a 6,300 pies de altura.