El problema no es el precio. La compañía debe explicar mejor qué es la consola.
La división británica de Nintendo, a través de su responsable de marketing, Shelly Pearce, ha vuelto a insistir que las reducidas ventas de Wii U no se deben a un problema con su precio (que sea cara), sino a una falta de capacidad para comunicar la consola.
En declaraciones a MCV, Pearce ha anotado que el público general no sabe a ciencia cierta qué es la máquina y qué es lo que ofrece: “Hubo confusión en el lanzamiento de Wii U y uno de los mensajes es explicar a las mamás que es una consola nueva”.
“En términos de marketing hemos trabajado con los papás, que entiende de qué va la consola. Pero muchas mamás siguen sin saber qué es. […] Confían mucho en lo que se les dice en las tiendas a la hora de comprar”, declara la portavoz.
FUENTE: Meristation
