Al menos dieciocho personas resultaron heridas en los últimos días por peces carnívoros de la familia de la pirañas, en playas del río Paraná, que han sido temporalmente cerradas para evitar nuevos ataques.
La mayoría de los ataques de las «palometas» se han registrado en la ciudad de Rosario, que ya sufrió un grave ataque el pasado 25 de diciembre.
En las playas de esta ciudad, situada unos 300 kilómetros al oeste de Buenos Aires, diez personas resultaron heridas por los peces carnívoros, entre ellas una que corre el riesgo de perder parte de un dedo del pie.
Además de ser mordidos por palometas, los bañistas de otras localidades de la provincia central de Santa Fe también sufrieron el ataque de rayas, que se quedan en el área costera y lastiman con sus colas.
Los ataques de las palometas ocurren cuando el río está bajo y las temperaturas son elevadas en la zona de playa.
La playa municipal, donde los peces mordieron, seguirá habilitada como solar, pero estará restringido el acceso a las aguas del arroyo que en esta época tiene poca profundidad y no hay mucha corriente, características que lo volvieron ideal para la presencia de palometas y rayas.
En San Pedro, ciudad bañada por el río Paraná pero ya en la provincia de Buenos Aires, dos personas fueron heridas, una de ellas por una palometa y otra por una tarucha, un pez de cabeza alargada y dientes fuertes.
Durante este verano austral, casi un centenar de personas han resultado heridas por el ataque de las palometas en aguas argentinas.
En Rosario, 60 bañistas fueron mordidos en Navidad cuando se encontraban en el río Paraná, mientras que los peces atacaron otras cinco personas en la provincia de Misiones (noreste) y seis en Buenos Aires.
Fuente Televisa