Una mujer de 38 años de edad totalmente desesperada por las deudas, decidió que lo mejor para escapar de sus acreedores era cambiar no solo su identidad, sino también su sexo, según El Nuevo Diario. “Natalia”, como fue identificada por…
Una mujer de 38 años de edad totalmente desesperada por las deudas, decidió que lo mejor para escapar de sus acreedores era cambiar no solo su identidad, sino también su sexo, según El Nuevo Diario. “Natalia”, como fue identificada por…