Un chino de 53 años llegó a Australia para empezar una nueva vida, pero sus planes se vieron truncados. Un día fue llevado a una comisaría quejándose de un fuerte dolor y murió al día siguiente por posible negligencia policial. Un video arroja luz.
En mayo de 2010 Gong Ling Tang fue llevado ebrio a una comisaría de Dandenong, pero en menos de 24 horas el hombre ya estaba muerto debido a una enfermedad hepática desarrollada por el alcohol.
Unas imágenes del interior de la comisaría reveladas ahora han vuelto a poner de actualidad este caso, en el que podrían verse involucrados algunos agentes por negligencia. Un portavoz de la Policía afirma que se ha abierto una investigación de conducta profesional y que, de momento, se esperan los resultados de toda la investigación judicial.
Según se desprende de las investigaciones preliminares, tres horas después de su detención llegó a la comisaría el intérprete Yu Shu Lipski para ayudar a entrevistar a Tang. Lipski asegura que los agentes se burlaban del detenido, que le gritaban y que, en general, se mostraban poco respetuosos. Según el traductor, Tang estaba manchado de sangre e imploraba que lo llevaran al hospital porque se sentía mal. Sin embargo, los agentes decidieron liberarlo sin ofrecerle ninguna atención médica.
Como puede verse en las imágenes del video, cuando la policía abre la celda para ponerlo en libertad, Tang sale arrastrándose sin recibir ninguna ayuda. Poco después, dos agentes lo acompañan a la salida de la comisaría y lo dejan solo. Momentos más tarde, el hombre aparece desplomado en un charco frente a la estación de Policía.
Posteriormente fue hospitalizado en cuidados intensivos aquejado de hipotermia e insuficiencia hepática. Murió en el hospital a la mañana siguiente de hemorragia gastrointestinal. Hasta el momento ningún oficial ha sido acusado. Mientras, la viuda de Tang y su hija piden justicia tres años después de su muerte .
