Wren Kauffman tiene 11 años de edad y nació como una niña, pero siempre se sintió como un chico. Su familia no dudó en apoyarle y logró el cambio de sexo que deseaba, según el diario Daily Mail.
Ahora, con el inicio del curso escolar, Wren acudirá a la escuela, por primera vez, convertido en un chico. Sus profesores y compañeros de clase conocen el cambio y son conscientes de la transformación.
Wren supo desde muy joven que era diferente, “es como si estuvieras atrapado en el cuerpo de otra persona”, explicó en el citado diario.
Desde pequeño, el joven disfrutaba disfrazándose como sus héroes de comic, llevaba el pelo corto, con solo 3 años, preguntaba cuando iba a ser un niño.
A sus padres, en cambio, les costó más tiempo asumir que su hija era diferente. Con nueve años, Wren, les dijo que no podía ser feliz siendo una chica, y decidieron apoyarle.
Los padres de Wren acudieron al Instituto de Minorías Sexuales de la Universidad de Alberta donde está recibiendo inyecciones para retrasar la pubertad hasta los 16 años, cuando decidirá si quiere recibir el tratamiento con hormonas masculinas.
Hasta los 18 años no podrá someterse a una operación de cambio de sexo. Fuente: Telecinco.es