SANTO DOMINGO, RD.- El presidente del Consejo Nacional de Drogas, Fidias Aristy, denunció este domingo que la extradición de reconocidos narcotraficantes criollos hacia los Estados Unidos se ha convertido en una especie de legalización al lavado de activos en que incurren los capos.
Fidias Aristy lamentó que luego de pasar “una corta estadía en cárceles norteamericanas” los narcotraficantes regresan al país a disfrutar la inmensa fortuna que han acumulado con ese criminal negocio, y le estrujan eso a la sociedad dominicana.
Explicó que como consecuencia del tratado vigente, las autoridades tienen las manos atadas para perseguir legalmente esa gran cantidad de bienes que obtienen los capos de sus acciones delictivas.
Entrevistado en el programa semanal D´Agenda, el presidente del Consejo nacional de Drogas dijo que la extradición se ha convertido en un premio para el narcotráfico y para los beneficiarios de ese proceso judicial.
“Eso es un negocio verdaderamente redondo, y convierte en legalidad lo que es un lavado de activo, porque ya esa gran fortuna está exenta de persecución, está legalizada porque no puede legalmente ser perseguida, y ya puede ostentarla, disfrutarla y arrojarla al rostro de toda la sociedad dominicana”, se quejó el funcionario.
Agregó que el mecanismo de extraditar hacia Estados Unidos es una forma muy benigna que casi raya en la impunidad.
Recordó que anteriormente se decía en Colombia que “era mejor morir que ser extraditado a una cárcel norteamericana, y que ahora se puede decir en la República Dominicana y en ese país sudamericano, que es mejor ser extraditado a Estados Unidos que cualquier cosa”.
“Y eso constituye un ejemplo absolutamente nocivo para la juventud y la sociedad dominicana, pero sobre todo para los sectores que tienen que estudiar y esforzarse para alcanzar un puesto de trabajo y una profesión y jamás acumular riqueza y ostentaciones como estas”, acotó.
Dijo que además de eso hay que calcular el costo económico y social que implica para el país, las actividades criminales que se derivan de las violentas acciones del negocio del tráfico y consumo de drogas.
Puso el ejemplo especifico del caso más reciente del convicto Yubel Enrique Méndez, alias Oreganito, sindicado como uno de los sujetos que mayor fortuna ha amasado proveniente del narcotráfico, y tras cumplir una condena de cuatro años y medio en Estados Unidos regresa al país sin que se le pueda tocar sus bienes.
Dijo que esos sujetos regresan al país generalmente hacer lo que saben hacer, trabajo delictivo, aunque aclara que no todo deportado regresa al país a seguir delinquiendo, pero que a su entender, la reinserción tiene que ser demostrada y no presumida.
Recordó que por más críticas que se le puede hacer a la justicia dominicana, sin embargo el narcotraficante más emblemático en su época como lo fue Rolando Florián Feliz duró más tiempo en prisión, condenado por los tribunales del país, que todos los extraditados juntos.
