Proveniente de la transformación del néctar de las flores, la miel ha sido utilizada desde la antigüedad para aderezar las comidas o dar un toque especial a los postres, por tratarse de un nutritivo endulzante natural.
No obstante, además de eso, sus beneficios en la salud son realmente amplios.
Entre los más importantes están:
- Mejorar la memoria
- Alivio de alergias temporales
- Antibiótico en bacterias multirresistentes
- Ayudar en la metabolización del alcohol.
En lo que se refiere a la cosmética, la miel es bien valorada por su capacidad para hidratar y suavizar la piel sin riesgos.
Por eso, esta vez te hemos preparado una lista de faciales de miel que deberías empezar a usar ya mismo.
Beneficios de los tratamientos faciales de miel
Antes de darte las recetas de estos faciales de miel, hablemos de sus beneficios. Verás que son muchos y muy interesantes.
Excelente limpiador
Al ser una sustancia altamente ácida, la miel impide la proliferación bacteriana.
- Al entrar en contacto con el agua produce pequeñas cantidades de peróxido de hidrógeno que actúa como antibacteriano. Esto proporciona una piel libre de barros, impurezas y acné.
- Las enzimas naturales que nos aporta la miel contribuyen a eliminar las toxinas de la piel para lograr una limpieza profunda de la dermis.
Astringente
- Esta clase de tratamientos faciales cuenta con la cualidad de renovar y dar vigor a nuestra piel, reduciendo los poros y la grasa del cutis.
- También disimula el cansancio.
- Con la ayuda de sus azúcares naturales, la miel libera los poros obstruidos, lo que se traduce en una limpieza facial profunda.
Hidratante
- La miel proporciona a la piel una extrema hidratación.
- Gracias a la acción de sus minerales y vitaminas es capaz de humectar durante todo el día.
- De esta forma la piel luce más flexible y conserva mejor su elasticidad natural a largo plazo.
- La miel contiene antioxidantes que ayudan en el retraso del envejecimiento y a evitar las arrugas prematuras.
- Además funciona como protector y ayuda a conservar los aceites naturales de la piel, por lo que la hace suave y elástica.
Tratamientos faciales según tu tipo de piel
Ahora que conoces sus propiedades seguro que quieres conocer los faciales de miel más adecuados para tu tipo de piel. Aquí los tienes:
1. Miel, naranja y limón
Las propiedades hidratantes de la miel y la naranja forman una combinación perfecta para lograr la regulación de la piel grasa.
Esta mascarilla facial funciona como un limpiador que deja excelentes resultados con cero esfuerzo.
Ingredientes
- 1 cucharadita de polvo de cáscaras de naranja (5 g)
- 1 cucharadita de jugo de limón (5 ml)
- 1 cucharadita de miel (7,5 g)
Preparación
- Antes de utilizar la cáscara de naranja debemos asegurarnos de que es de procedencia ecológica para evitar los químicos.
- En un recipiente mezcla bien todos los ingredientes hasta lograr una pasta espesa.
- Al aplicar este facial sobre la piel de cara y cuello, masajea con movimientos circulares.
- Deja actuar por 20 minutos y luego enjuaga con agua fría.
2. Aceite de oliva, huevo y miel
Cuando la piel no tiene la hidratación necesaria, comienza a escamarse. La piel seca se caracteriza por ser muy fina, presentar tirantez, opacidad y poros cerrados.
Si tenemos este tipo de cutis, es importante realizar tratamientos faciales de miel regularmente para no perder la hidratación.
Ingredientes
- 1 yema de huevo
- 1 cucharada de miel (25 g)
- 1 cucharada de aceite de oliva (16 g)
Preparación
- Coloca en un pequeño recipiente los tres ingredientes y mezcla hasta lograr una consistencia homogénea.
- Aplica la mascarilla en el rostro, previamente lavado.
- Deja actuar durante 15 minutos y retira con agua tibia.
3. Miel y avena
La avena absorbe la suciedad y los residuos naturales que se acumulan en los poros, por lo que ayuda en la disminución del acné.
Los faciales de miel combinados con avena forman un astringente especial para combatir la piel grasa.
Ingredientes
- ¼ de taza de avena en hojuelas (22 g)
- El jugo de 1 limón
- 1 cucharada de miel (25 g)
Preparación
- Licúa la avena hasta lograr un fino polvo.
- Mezcla el polvo de avena con el jugo de limón y la miel.
- Aplica esta mezcla sobre tu rostro, y déjala actuar por 15 minutos.
- Retira con agua fría.
4. Agua de rosas, papaya y miel
Aunque en la piel seca no es recomendable utilizar astringentes debido a que puede empeorar esta condición, al combinar estos ingredientes puedes obtener un facial suave que cumplirá su función sin maltrato.
Si utilizamos conjuntamente las propiedades exfoliantes de la papaya, junto a la hidratación que te brinda la miel y el agua de rosas obtendremos un resultado único.
Ingredientes
- 1 rebanada de papaya
- 1 cucharadita de miel (7,5 g)
- 1 cucharadita de agua de rosas (5 ml)
Preparación
- Tritura la papaya y combina con el resto de los ingredientes hasta lograr una pasta consistente.
- Aplica en tu piel y déjala actuar por 5 minutos.
- Enjuaga con agua tibia.
Últimas consideraciones sobre los faciales de miel
Los tratamientos faciales de miel son tan versátiles que funcionan para cualquier tipo de piel.
Si combinamos de los ingredientes correctos podemos obtener un resultado satisfactorio y neustra piel permanecerá resplandeciente, suave y libre de impurezas.
Recuerda que para iniciar cualquier tratamiento facial debes lavar bien tu rostro con lo que puedes contribuir a acentuar el efecto deseado.
Lo ideal sería aplicar estos tratamientos una vez a la semana.