Mariah Carey se puso grave por beber alcohol después de una reciente liposucción que se realizó, pero afortunadamente se recuperó pocos días después.
La cantante se realizó este procedimiento para mejorar su figura, pero por indicaciones médicas debió haber guardado reposo y se le prohibió beber alcohol durante su recuperación.
Pero Carey no hizo caso y tomó algunas copas de más, por lo que tuvo que ser internada en el hospital, donde fue estabilizada. Es conocida la afición de la cantante de 45 años al alcohol, por lo que se ha rumorado que podría ingresar a una clínica de rehabilitación.