La fibra no se puede digerir, y tampoco aporta nutrientes ni energía. Sin embargo, los expertos nos dicen que hay que tomar unos 30 gr. al día, contribuye a prevenir el estreñimiento, ayuda a mantener el colesterol en cifras normales y puede evitar algunos tipos de cáncer. Dos tipos: insoluble que actúa sobre el tránsito intestinal, y soluble con más beneficios como nivelar la glucosa y el colesterol y una maravilla para los diabéticos.
Donde se encuentra la fibra
En el aguacate, manzana, uvas, naranja, ciruela entera, mandarina, kiwi, almendras, nueces, alubias blancas secas, garbanzos, lentejas, alcachofa, berza cruda o cocida, coliflor, zanahoria, cebolla cruda, tomates, patata asada, brécol, espárragos cocidos, cereales de salvado, germen de trigo, cereales all bran, arroz blanco cocido, macarrones cocidos, pan de trigo blanco.
La fibra dietética se consigue gracias a una alimentación sana de frutas, verduras, legumbres, cereales integrales. Coma 5 veces al día, buen desayuno de zumo casero, pan de centeno o integral y la chorretada de aceite de oliva virgen; al mediodía 4 nueces o un yogur; coma brécol con zanahorias o una ensalada con tomate, lechuga y cebolla y de postre una pieza de fruta o un vaso de leche desnatada-calcio; meriende cereales con leche omega-3; y para cenar pescado si le gusta; un filete de carne o ensalada de tomate, eso sí, a buena hora, con la cabeza puesta en mover el intestino.
No olvide los huevos, muy ricos y buen alimento. Todos los años se registran cerca de un millón de nuevos casos de cáncer de intestino en el mundo y el estudio EPIC prospectivo europeo sobre la dieta y el cáncer dice que los que toman 35 gr. de fibra al día tienen un 40% de riesgo menor que los que toman 10 gr. día; y aquí en esta cifra de consumo de fibra estamos nosotros.