Según el decreto 34-2013, los medios de comunicación radiales que incumpla tal decreto conllevarán a “severas sanciones”, aun no especificas.
A partir del 16 de noviembre las emisoras de radio de Guatemala tendrán totalmente prohibido reproducir ritmos urbanos “que tergiversan la sensualidad consustancial a la mujer”, según un decreto aprobado por el Congreso de la República de Guatemala.
Según el decreto 34-2013, los medios de comunicación radiales que incumpla tal decreto conllevarán a “severas sanciones”, aun no especificas.
La medida ha llegado en alusión al reggaetón, el cual gana adeptos en el país y que ahora el castrismo quiere eliminar por lacerar “la sensibilidad popular”, atentar “contra la ética ciudadana” y desvirtuar “la verdadera imagen de la creación artística”, como señala el portal web Enelbrasero.com.
Por lo tanto, Guatemala queda libre del género musical basado en un estilo rítmico caracterizado por cortes regulares sobre una música de fondo tocada por la batería, que desde años atrás utiliza términos como “mamita, conejita, gatita, perrita, zorrita, putita ” y terminan con los adjetivos “duro, suave, fuerte”, entre otros .
Es por ello que además de la música de Daddy Yankee a la que se le ha puesto esa prohibición, el dúo puertorriqueño Wisin & Yandel también se encuentra dentro de la lista de música a prohibir en el país.
La redacción de la primera parte del Decreto en Guatemala textualmente dice:
“EL CONGRESO DE LA REPUBLICA DE GUATEMALA CONSIDERANDO: Que con fecha de 16 de octubre del año 2013, el Honorable Congreso de la República aprobó el Decreto Número 34-2013, mediante el cual se aprobó la prohibición de la radiodifusión de la música urbana “los ritmos seudoartisticos y con letras agresivas, textualmente explícitos, obscenos, que tergiversan la sensualidad consustancial a la mujer Guatemalteca”.
El decreto Número 34-2013 del Congreso de la República de Guatemala menciona el plazo de 30 días para que sea cumplido y copia nuevamente parte el comunicado del ICM en su advertencia en el incumplimiento de dicho Decreto: “descalificación profesional de aquellos que violen la ética en sus presentaciones hasta la aplicación de severas sanciones a quienes, desde las instituciones, propicien o permitan estas prácticas”.
FUENTE: elmundo.com.sv