Julio Iglesias puso una nueva traba en la demanda de paternidad interpuesta por Jorge Sánchez, un hombre de 42 años que asegura ser su hijo.
El cantante tiene hasta el 27 de julio para responder a la acción legal, pero -según publica hoy el diario El País -desconoció la notificación que se le hizo en su finca de Ojén, en Málaga, España, asegurando que ese no es su domicilio.
Fernando Osuna, abogado del demandante, explicó que Iglesias argumentó que hasta 1978 su último domicilio en España estaba en Madrid, por lo que ahí debería ser entregado el escrito.
De acuerdo letrado, los empleados del cantante en su finca en Ojén se demoraron un mes en recibir la comunicación de la demanda, la que fue admitida a trámite a fines de 2017 por un tribunal de Valencia.
Y ahora, cuando Iglesias ya fue notificado, sus representantes alegaron que ese no era el lugar válido para hacerlo.
“Está retrasando este caso todo lo que puede, primero por negarse a recoger la demanda, y ahora con la competencia de los tribunales“, sostuvo Osuna, quien agregó:
“Debe tener mucho miedo a que la Justicia dicte sentencia en su contra“.
El abogado adelantó que en un corto plazo se pedirá que el artista se someta a una prueba de ADN en España, la que corroboraría el examen que Sánchez presentó cuando la demanda fue admitida a trámite y que indicaba una coincidencia genética de 99.9%.
Esta no es la primera vez que Sánchez demanda a Iglesias. El hombre había presentado una acción legal en 1992 también ante un juzgado de Valencia, que lo declaró hijo del cantante. Sin embargo, este logró revocar la sentencia porque no hubo examen de ADN.
El demandante alega ser fruto de una relación que Iglesias tuvo con la bailarina portuguesa María Edite, con la que el cantante se vio varias veces en 1975.
