El rapero Ozuna decidió salir por fin al paso de los rumores para confirmar que, efectivamente, las comprometidas imágenes que circulaban desde hace unos días por la esfera virtual pertenecían a un vídeo íntimo suyo que grabó siendo aún menor de edad.
En los comunicados que siguieron al mensaje inicial de la estrella del reguetón, su mánager y su representante legal especificaron que la grabación en cuestión -en la que en un principio se aseguró que él aparecía masturbándose mientras escuchaba a dos hombres manteniendo relaciones sexuales- había sido editada para causar el mayor daño posible a la imagen pública de su cliente e insistieron en que bajo ningún concepto se podía considerar “de carácter homosexual”.
La historia ha seguido complicándose según pasan las horas tras salir a relucir el nombre de Kevin Fret: el joven de 24 años que era una de las pocas figuras de la escena trap abiertamente gay y que fue asesinado hace unas semanas mientras viajaba en moto por Puerto Rico.
El abogado de Ozuna, Antonio Sagardía, ha reconocido que era él quien trató de extorsionarle afirmando que poseía un material muy comprometido del reguetonero y exigiendo dinero a cambio de no filtrarlo. Hasta el momento nadie sabe cómo habría obtenido el vídeo porno. En total, habría recibido alrededor de $50.000 dólares en forma de varios pagos hasta su trágico fallecimiento.
El músico, por su parte, se ha limitado a condenar sus acciones pasadas y a pedir perdón a su familia -está casado y es padre de dos niñas pequeñas- afirmando que todo fue un error de juventud.
