El Papa Francisco comenzó a mostrar su cariño por los mexicanos con el típico sombrero de charro que lució este viernes en el avión que lo llevaba a Cuba.
A bordo de un Airbus A330 de Alitalia, el pontífice apareció ante los reporteros después de haber desayunado luciendo un elegante sombrero de gamuza color marfil. El papa, de 79 años, parecía estar de muy buen humor pese a la compleja gira que le espera en México, que visita por primera vez desde que asumió el rol de máximo representante de la fe católica.
«Un deseo que tengo es pararme delante de la Virgen de Guadalupea», dijo Francisco, en cuyo sombrero charro se veía bordado su rostro sonriente y un mapa de América Latina, además de una franja de rosas símbolo de la fe guadalupana.