SANTO DOMINGO, RD.- ¿Hasta cuándo será nuestro sufrimiento ingeniero Diandino?, dice un letrero en el cristal de la puerta de una tienda en la avenida San Vicente de Paul, en donde se realizan los trabajos de la extensión de la segunda línea de Metro de Santo Domingo.
Al igual que ese cartel, otros se observan en diferentes negocios de la zona, que en forma de protestas han colocado sus propietarios, quienes afirman que a causa de la obra han perdido clientela y dinero.
“Las ventas han bajado significativamente y esa planta pasa las 24 horas encendida”, expresa en tono de queja, Luis Figuereo, encargado de la tienda de electrodomésticos Gisselle, ubica frente a una de las construcciones de una de las estaciones de la línea.
Según explica, el problema en el tránsito, además del polvo y el ruido por la planta eléctrica y las maquinarias, han hecho que las ventas disminuyan en casi 70 por ciento, situación que han comunicado a la Oficina Para el Reordenamiento del Transporte (Opret), a través de una comisión de propietarios de negocios de la zona.
“Las calles están condenadas, las ventas han bajado de forma asombrosa, antes eran más elevadas y ahora después del asunto del metro la gente para evitar los tapones no cruzan por la vía”, dijo.
Indicó que la comisión ha acudido en varias ocasiones a la Opret pero que han hecho caso omiso a sus demandas.
“Nosotros queremos una indemnización, que nos ayuden en algo”.
Asimismo, doña Gladis Castillo, propietaria de Novedades Elizabeth, dice que para esta época navideña los ingresos en su tienda eran mayores y que la causa principal de la merma ha sido las dificultades que ha traído la construcción del metro.
Otras tipos de negocios, como clínicas, tienda de repuestos y talleres, también tienen en sus puertas carteles expresando sus quejas.
“El Metro debe compensar los negocios”, “El comercio no aguanta más”, son solo algunos de los mensajes escritos en letra color rojo en los establecimientos ubicados en la avenida San Vicente de Paúl, por donde recorrerá la segunda línea que llegara hasta Mega Centro.
LOS TRABAJOS Y LAS FAMILIAS AFECTADAS
En cuanto a los trabajos del metro, según pudo observar un equipo del Listín Diario, continúan avanzando a ambos lado del río Ozama, donde ha sido desalojadas cientos de familias para la construcción de un puente que conectará la línea con el municipio Santo Domingo Este. Además, se han desalojado y demolido varios negocios ubicados en la zona, como plazas comerciales, tiendas y un hotel.