Selena Gómez debutó en los American Music Awards con su tema ‘The Heart Wants What It Wants’ («El corazón quiere lo que quiere»), una canción que se rumora pudo ser inspirada sobre su complicada relación con el cantante canadiense Justin Bieber.
Durante su presentación, Selena paró de cantar y susurró: «Gracias Jesús para sí misma».
Al final de la canción, la exchica Disney finalizó con los ojos llorosos, por lo que su amiga Taylor Swift, quien se encontrabá en las primeras filas del evento también se conmovió al ver a su compañera de profesión en ese difícil momento y, de igual manera, también se pudo ver a la hermosa rubia contagiada por la emoción y al borde de las lágrimas.
Fuente: Eldiariony