Si estás buscando bajar de peso sin morirte de hambre ni hacer grandes sacrificios, y además cuidando tu salud, has llegado al lugar ideal: hoy queremos explicarte en qué consiste la dieta disociada. No dudes en probarla y bajar esos kilitos que tienes de más.
¿Qué es la dieta disociada?
La dieta disociada consiste en no mezclar ciertos tipos de alimentos en la misma comida, ya que juntos se convierten en grasas que por separado no lo hacen. No hay una base científica para ello, pero sí es cierto que el resultado es una menor ingesta calórica y mejor distribución de la energía, que por ende, nos hace adelgazar.
Debemos hacer 5 comidas diarias –desayuno, almuerzo, merienda, cena y un snack–. La fruta y la fruta seca debe comerse en el almuerzo o como snack, nunca combinadas. Los hidratos se deben comer en el desayuno y almuerzo, las proteínas en la cena. En principio, puedes comer toda la cantidad que quieras, por lo que es una dieta donde no pasas hambre. Lo ideal es que hagas ejercicio moderado –mínimo 20 minutos al día–.
¿Qué alimentos no se pueden mezclar en la dieta disociada?
- No se pueden mezclar alimentos ricos en proteíans (carne, pescado, huevos) con carbohidratos (cereales, pan, pasta).
- No se pueden mezclar grasas (aceites, frutos secos, mantequillas) con proteínas, por ende, cocinar todo hervido y evitar los fritos.
- No mezclar diferentes tipos de carbohidratos.
- Los vegetales pueden mezclarse con todo, excepto con frutas.
- La fruta no se puede mezclar con otros alimentos, debe comerse sola. Tampoco se deben mezclar varios tipos de fruta en una sola comida.
- Los frutos secos no se deben mezclar con ningún otro alimento.
- El azúcar se debe reemplazar por un endulzante –puede ser natural–.
Ventajas y desventajas de la dieta disociada
Entre las ventajas de la dieta disociada encontramos que no pasaremos hambre, nuestra digestión y movimientos intestinales serán mejores, y perderemos peso poco a poco, de forma saludable y con menor efecto rebote.
Sin embargo, también tiene sus desventajas: puede llegar a convertirse en una dieta poco balanceada y con deficiencias nutricionales, aunque la idea en principio no es esa. Todo depende de cómo administremos las cantidades de alimentos.
Ejemplo de un día en la dieta disociada
Desayuno
- Café o té.
- Dos rebanadas de pan con tomate.
Snack
Higos secos.
Almuerzo
- Ensalada de lechuga, tomate y cebolla con aceite de oliva y vinagre.
- A elección entre pasta, arroz con vegetales o legumbres.
Snack
- Fruta
Cena
- Sopa, puré, vegetales
- Algún tipo de carne.
Fuente imujer