Si comparamos el hardware de los nuevos iPhones con el de otros dispositivos insiginia de compañías como Samsung, HTC, LG o Sony por ejemplo, veremos que el smartphone de Appleno es nada llamativo, algunos incluso sugieren que el móvil de la manzana tiene especificaciones de hace dos años, lo cual puede sonar bastante cierto si tenemos en cuenta que hoy en día casi todos los smartphones de gama alta llevan procesadores quad-core y 2GB de RAM por lo menos.
Pero lo cierto es que el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus sí guardan algunas sorpresas debajo de su carcasa. Según lo que han podido investigar los chicos de Chipworks al desarmar ambos dispositivos, parece que los dos cuentan con algo que no tenían los iPhones anteriores: dos acelerómetros (en lugar de uno). Esto no solamente permite administrar la energía restante en forma más precisa, sino que además brinda una mejor experiencia al usuario.
Estos dos componentes han sido fabricados por la firmas Bosch e InvenSense. El de InvenSense es un acelerómetro más sensible y que puede gastar mayor cantidad de energía, mientras que el de Bosch funciona rápidamente y gasta poco, según lo que se ha podido averiguar hasta ahora. ¿Y qué significa todo esto para el usuario final? Básicamente, si el iPhone detecta que no tienes necesidad de usar el de InvenSense, comenzará a usar el de Bosch. Esta tecnología es bastante parecida a la big.LITTLE que usan compañías como Samsung en sus procesadores octa-core.
Estos dos acelerómetros permiten que el teléfono consuma menor cantidad de energía cuando no es requerida, y al tener un inicio más rápido gracias al de Bosch, la experiencia del usuario se ve mejorada. Según Chipworks, Apple pudo haber dejado solo el acelerómetro de InvenSense, pero al añadir el otro han dejado en claro una vez más el elegante trabajo que realizan a nivel de ingeniería.
Fuente:Tecnomagazine